El síndrome de la boca ardiente provoca dolores en lengua y boca en pacientes

  • Dr. Vicente R. López
El síndrome de la boca ardiente provoca dolores en lengua y boca en pacientes

El síndrome de boca ardiente ( SBA ) : es una enfermedad de etiología desconocida que consiste en una alteración sensorial desagradable y estresante en la que una persona experimenta dolor en curso, de moderado a severo en la lengua y/o boca.

El ardor bucal suele aumentar progresivamente durante el día, alcanzando su intensidad más alta al final de la tarde . En la mayoría de pacientes el dolor está ausente por la noche; normalmente no los despierta, pero les dificulta conciliar el sueño. Quizás debido a esta dificultad, al dolor constante, o a ambos, estos pacientes presentan a menudo cambios de humor, incluyendo irritabilidad, ansiedad y depresión. Comúnmente, además de ardor, los pacientes experimentan síntomas tales como alteración del gusto, sensación punzante, sequedad, intolerancia a las prótesis. Las personas que padecen el síndrome de boca ardiente tienen una sensación de “quemazón” que compromete generalmente a la lengua, localizándose comúnmente en la punta y los bordes, pudiendo llegar también a los labios, el paladar y la mucosa yugal, e incluso a la garganta y el suelo de la boca. Afecta con mayor frecuencia a las mujeres, mayores de sesenta años, en el periodo posmenopáusico. Muchas personas se recuperan de manera espontánea a los seis o siete años . A menudo, aunque no siempre ,la sensación de boca seca y sentido del gusto alterado acompañan al dolor. Se considera que el SBA entra en la categoría general de “dolor neuropático“, lo que significa que probablemente es el resultado de una función nerviosa alterada, posiblemente en los nervios que transportan la sensación del sabor. Las carencias de hierro, ácido fólico y vitamina B constituyen los factores generales que provocan la enfermedad sumado al hábito de empuje lingual sobre los dientes, los traumatismos dentarios, la presencia de sarro, las superficies de prótesis ásperas o con bordes agresivos, las reacciones alérgicas a materiales dentales, los irritantes químicos como lápices labiales, pastas dentífricas, y uso prolongado de colutorio. Existe una gran diversidad de fármacos que, entre sus efectos, producen xerostomía(sequedad bucal), lo que está íntimamente relacionado con el ardor bucal. Entre ellos se encuentran antihistamínicos, neurolépticos, algunos antihipertensivos, y antiarrítmicos. Para algunos autores la medicación con L-tiroxina es el factor farmacológico más importante relacionado con el SBA. Los resultados de Bergdahl y cols. confirman una relación entre los medicamentos y el SBA, que se agrava con la interacción de otros factores, como enfermedades sistémicas y condición mental de los pacientes. Además, los pacientes que la padecen presentan un gran componente emocional, stress psicológico y tendencia a la neurosis. Son muy frecuentes los cuadros clínicos de ansiedad y depresión asociados a trastornos psiquiátricos familiares .También suelen presentar cancerofobia, ya que sus síntomas no remiten a pesar de múltiples remedios. TRATAMIENTO: debido a la característica multifactorial de esta enfermedad, no existe un tratamiento específico establecido que tenga un efecto benéfico probable. El tratamiento convencional para el SBA consiste en medicamentos usados para tratar el dolor neuropático en general, incluyendo anticonvulsivos, sedantes de la familia de benzodiazepinas y antidepresivos tricíclicos. Actualmente no hay investigación adecuada para determinar la eficacia de estos tratamientos. Combinación de drogas: se ha comprobado la eficacia del acido alfa lipoico (ALA), y de la gabapentina (GABA), utilizadas tanto en forma individual como conjunta, para la disminución de la sensación de ardor de los pacientes. Los fármacos administrados tanto por separado como en forma conjunta, fueron beneficiosos para disminuir los síntomas del síndrome de boca ardiente. La mayor cantidad de resultados favorables se obtuvieron en aquellos que recibieron la combinación de ambas drogas, con un 70% de casos con disminución del ardor y con una probabilidad trece veces mayor de presentar alivio con respecto a los que recibieron placebo. Los antidepresivos tricíclicos en bajas dosis actúan sobre este tipo de dolor crónico como analgésicos. El clonacepam de aplicación tópica ha conseguido reducir la sintomatología en un gran número de pacientes. También se ha propuesto lacapseicina tópica. Es aconsejable mantener por el día la boca ocupada, masticar trozos de hielo , enjuagues de menta ,buches de solución de ajo y cebolla , beber agua con frecuencia para aliviar el ardor y no usar dentadura postiza por la noche.